Después de usar durante un tiempo Android es posible que quieras comprar alguna aplicación. Puede ser por querer agradecer el esfuerzo del programador por un programa que uses mucho, usar las funciones extras que no tiene la versión gratuita o aprovechar los descuentos que salen en el Market. Un primer pensamiento puede ser “para que voy a comprar un programa si lo puedo tener gratis”. Esto es cierto, hay páginas que te permiten acceder a los programas de forma gratuita. La gran mayoría de los programas en el Market son gratuitos y se financian mediante la publicidad. Los que son de pago, ofrecen funciones extras a la versión gratuita y pueden costar un par de euros. La decisión queda en manos del usuario.
Todas las compras están asociadas a una cuenta de Gmail, con esto, si compramos un programa y tenemos otro teléfono o tablet, será posible instalarlos sin problema. El periodo de prueba antes de que se cargue en la tarjeta el pago es de 15 minutos. Aunque algunas operadores ya permiten pagar las aplicaciones en la factura del teléfono, el método de compra que funciona sin problema es el pago con tarjeta de crédito. Si no quieres usar una tarjeta de crédito existen en el mercado tarjetas de prepago para su uso en la red y funciona como una tarjeta monedero.
Si tienes alguna duda en los bancos que ofrecen este servicio puedes ponerte en contacto conmigo usando el formulario de la web. No lo incluyo en el artículo para no hacer publicidad gratuita. Una vez lanzado en Android Market, seleccionamos una aplicación de pago y pulsamos en la opción de comprar. En la primera compra será necesario introducir el número de la tarjeta, la caducidad y un código que hay en la parte trasera. Este paso se realiza la primera vez. Una vez rellenado los datos, la compra seguirá y la aplicación se descargará en el teléfono. Si no nos gusta la aplicación es posible devolverla antes de 15 minutos pulsando en “Obtener reembolso”.
En Android Market también tiene un gestor web en el que podemos comprar aplicaciones, ver las que hemos instalado y gestionar los dispositivos asociados a la cuenta. Si un programa no se puede instalar en el terminal, por ejemplo es un juego que necesita un tablet, no se aparecerá en el Android Market del teléfono.
Aparte del Android Market hay otras tiendas en la web que funcionan de forma similar. Un detalle importante (que tiene el Android Market) es que si en algún momento se detecta una aplicación “maligna”, el propio Market la borrará de forma automática.